Durante la semana dedicada al "Día del Libro" llevamos a cabo numerosas actividades para fomentar el hábito lector y el gusto por los diversos géneros literarios, desde el cuento y la novela hata el cómics o la poesía.
Una de las primeras actividades que realizamos fue el apadrinamiento lector que consiste en leer un libro a otro niño o niña del colegio, normalmente de un nivel inferior. En nuestro caso, acudimos a la la etapa de infantil, concretamente a las clases de 3 y 4 años, cuyo alumnado nos estaba esperando con una gran alegría.
El libro que tuvimos que elegir tenía que adaptarse al nivel de nuestro público, dramatizarlo y leerlo con un ritmo y entonación adecuado para atraer su atención.
El día previo a la lectura del cuento visitamos a esos niños y niñas. Tras un breve sondeo y presentación de los mismos nos dispusimos a elegir a dos niños o niñas. Nos presentamos y apuntamos sus nombres en un papel. De esta forma tuvimos un primer contacto con nuestro público y ellos, a su vez, se familiariarizaron con nuestras caras, las caras de sus "padrinos".
Al día siguiente salimos a un patio exterior, elegimos un zona del mismo, nos sentamos con ellos y ellas y comenzamos la lectura. Todos y todas estaban entusiasmados, pasamos un rato muy agradable y enriquecedor. Algunos intercambiamos libros cuando terminabamos de leer para que la experiencia fuese aún más enriquecedora. El alumando de infantil tuvo un comportamiento ejemplar, al igual que el alumnado de 6ºC de Primaria.
Una de las primeras actividades que realizamos fue el apadrinamiento lector que consiste en leer un libro a otro niño o niña del colegio, normalmente de un nivel inferior. En nuestro caso, acudimos a la la etapa de infantil, concretamente a las clases de 3 y 4 años, cuyo alumnado nos estaba esperando con una gran alegría.
El libro que tuvimos que elegir tenía que adaptarse al nivel de nuestro público, dramatizarlo y leerlo con un ritmo y entonación adecuado para atraer su atención.
El día previo a la lectura del cuento visitamos a esos niños y niñas. Tras un breve sondeo y presentación de los mismos nos dispusimos a elegir a dos niños o niñas. Nos presentamos y apuntamos sus nombres en un papel. De esta forma tuvimos un primer contacto con nuestro público y ellos, a su vez, se familiariarizaron con nuestras caras, las caras de sus "padrinos".
Al día siguiente salimos a un patio exterior, elegimos un zona del mismo, nos sentamos con ellos y ellas y comenzamos la lectura. Todos y todas estaban entusiasmados, pasamos un rato muy agradable y enriquecedor. Algunos intercambiamos libros cuando terminabamos de leer para que la experiencia fuese aún más enriquecedora. El alumando de infantil tuvo un comportamiento ejemplar, al igual que el alumnado de 6ºC de Primaria.
El apadrinamiento lector me resultó muy fácil pero tuve un respeto porque luego los niños tenían que decir si les gustó los cuentos y como se los había leído, me gustó la sensación que sentía porque de pequeña ( con los mismos años que ellos) me leían cuentos como este:
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